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Resumen: El primer año de Donald Trump como presidente de los Estados Unidos

Estados Unidos ha presentado un descenso en cesantía que la ubica en los menores niveles de los últimos 17 años; la bolsa está en alza sostenida y la lucha contra el terrorismo de islámicos radicales ha surtido efectos en diversos sitios.

Hace unos días asistimos al discurso del Estado de la Unión de Donald Trump, el equivalente a la Cuenta Pública realizada por los presidentes de Chile los 21 de Mayo en el Congreso Nacional, en donde el presidente norteamericano presentó, además de un resumen de lo realizado durante el último año, las aspiraciones que tiene como mandatario para los años que vienen.

Lo interesante de esto es que es su primera cuenta pública, ya que se ha cumplido un año desde que asumió la presidencia, luego de derrotar a su principal contendora, la demócrata Hillary Clinton.

Pero no podemos quedarnos sólo en que el interés es porque es su primer discurso del Estado de la Unión, ya que este ha sido, por lejos, el presidente más polémico que podamos recordar en la historia de Estados Unidos.

Escándalos de acoso sexual, declaraciones xenófobas, problemas vinculados a sus relaciones familiares y una incapacidad de controlar sus comentarios en Twitter son solo algunas de las cosas que rodean la vida privada de Trump. A esto se le deben sumar problemas referidos al enfrentamiento que ha debido soportar políticamente hablando, al tener una oposición fuerte que ha llevado, incluso, a cerrar el gobierno por no contar con la aprobación del presupuesto para el año 2018.

Dentro de las cosas que podemos mencionar de su primer año, está el alejamiento de las políticas ambientales instaladas por el país en años anteriores. Declaraciones del tipo “el ecologismo está fuera de control” o “al país le hace falta un poco de calentamiento global” denotan su postura frente a temas ambientales, optando por reflotar viejas prácticas que van en contra de lo que los países desarrollados han estado trabajando desde hace tiempo, abandonando incluso el Acuerdo de París contra el cambio climático.

También es conocida su política con los extranjeros, al generar un veto contra refugiados musulmanes de 7 países o mantener su postura de levantar un muro en la frontera con México. No podemos olvidar su deseo de expulsar del país a los llamados “dreamers”: extranjeros que llegaron a Estados Unidos siendo niños, que han vivido toda su vida en ese país pero que, al no regularizar su situación migratoria, son considerados inmigrantes ilegales, a pesar de haber estudiado o estar trabajando de forma legal en el país. Al mismo tiempo, vuelve a paralizar las relaciones con Cuba, que habían sido destrabadas por Obama luego de décadas de problemas entre ambos países.

Además, ha creado gran revuelo la llamada “Trama rusa de Trump”, que se centra en la investigación de supuestas conexiones del presidente estadounidense y sus cercanos con entidades rusas que habrían robado votos demócratas en las elecciones en que Trump fue elegido presidente.

Conocidas también son las declaraciones que ha realizado en contra de Kim Jong-Un, lo que ha generado un clima tenso a nivel internacional entendiendo que se está jugando un posible conflicto nuclear.

Pero bajo todas las polémicas, Estados Unidos ha presentado un descenso en cesantía que la ubica en los menores niveles de los últimos 17 años; la bolsa está en alza sostenida y la lucha contra el terrorismo de islámicos radicales ha surtido efectos en diversos sitios. Lo que impacta es que, aún con estos logros, la popularidad de Trump es la más baja en la historia de los presidentes de ese país, cosa que por supuesto no lo tiene contento.

Tendremos que ver qué más nos tiene preparado el magnate presidente para los próximos 3 años.

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