ESTANFLACIÓN: Sombra en las economías mundiales.
Se trata de una de las más peligrosas combinaciones para la
economía, ya que ambos elementos distorsionan el mercado y la
terapia de choque para combatir el estancamiento económico tiene
como efecto secundario el incremento de la inflación
Rossana Medlingth
Corresponsal para METRO Newsweek
Tras el conflicto de Evergrande en China, otro temor apareció y ensombreció a la
economía internacional: El miedo de que la situación actual desate en el mundo un
fenómeno de estanflación.
Esta situación, que se da cuando se junta un estancamiento del crecimiento
económico al mismo tiempo que se mantienen altos indicadores como la inflación
y el desempleo, lo que ha venido preocupando a expertos de todo el mundo
provocando distorsión en las ventas en las principales bolsas a nivel mundial.
En la actualidad no se ha visto un problema de estanflación porque ese riesgo se
ha venido camuflando gracias al gran crecimiento de la economía mundial.
No obstante, “una vez que en el 2022 ya no exista la comparación con esa base
estadística que presentaba importantes cifras de crecimiento en el PIB, se podría
empezar a materializar”.
Una alta inflación conlleva la pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores, la
contracción del consumo interno así como la desincentivación del ahorro y
búsqueda de rentas fuera de las actividades productivas. Asimismo, podría
provocar en un futuro mediato una desertización productiva que sería incapaz de
satisfacer la demanda de productos básicos y la posterior estanflación.
Dicho término supone la combinación de una inflación desbocada y un escenario de
recesión económica (una economía entra en recesión técnica después de dos
trimestres de caídas consecutivas del PIB nacional, según el Fondo Monetario
Internacional).
Fue acuñado en 1965 por el entonces ministro de Finanzas británico, Ian McLeod,
quien utilizó la palabra “stagflation” en un discurso ante el Parlamento británico.
Se trata de una de las más peligrosas combinaciones para la economía, ya que
ambos elementos distorsionan el mercado y la terapia de choque para combatir el
estancamiento económico tiene como efecto secundario el incremento de la
inflación. Y si a lo anterior se suma la incapacidad de mejorar las cifras de
empleo, la suma podría entrabar cualquier intento de política social de un país.
Rossana Medlingth
Corresponsal Internacional
METRO Newsweek